12 Jun Diez alimentos que tu gato te robará del plato

Ya hemos hablado de los diez alimentos que nunca jamás debes dar de comer a tu gato. Ahora os enseñamos diez alimentos de humano que tu gato sí puede comer pero siempre con moderación.

1. Queso rallado: A la mayoría les encanta. Quien tenga un gato sabrá lo difícil que es hacer que coma algo que no le gusta. Es una fuente de calcio que fortalecerá sus huesos. El requesón es seguro en la dieta del felino.

2. Lechuga: De cualquier tipo aunque no todos disfrutan ingiriendo este alimento. A Lisa, por ejemplo, le encanta robarla pero nunca se la come.

3. Pavo: Enséñale un poco de pavo y tendrás al gato comiendo, literalmente, de tu mano. La pechuga de pollo o las hamburguesas también son inofensivas en su dieta. Con lo que sí hay que tener más cuidado es con los embutidos porque son altos en sodio y es recomendable no darles demasiado. 

4. Calabaza: Aunque los gatos son carnívoros, muchos disfrutan comiendo verduras. La calabaza es una fuente de fibra y ayuda a que no se formen bolas de pelo.

5. Potitos: La mayoría de los gatos disfrutan con la comida para bebés pero hay que leer bien los ingredientes porque algunos contienen ingredientes como la cebolla o el ajo que son áltamente perjudiciales.

6. Yogur: A la mayoría les encanta. El desnatado suele ser el preferido. También pueden comer petit suisse.

7. Mantequilla: No en exceso pero una cucharadita un par de veces a la semana ayuda a eliminar las bolas de pelo.

8. Pan: Es otro de los alimentos con los que parece que disfrutan comiendo y no es perjudicial.

9. Arroz: Igual que los humanos nos beneficiamos de la dieta blanda; esto es, arroz y pollo, un gato que sufre problemas intestinales también puede beneficiarse de esta dieta. Otra cosa es que el arroz le guste y se lo coma. 

10. Sandía y melón: Hay que tener cuidado con las pepitas y con el exceso de azúcar y calorías pero muchos gatos parece que disfrutan con estas frutas sin que sean perjudiciales. Las semillas del melón pueden provocar obstrucciones en el intestino así que mucho cuidado con ellas.